Neymar es Neymar y sus circunstancias

Ortega y Gasset defendía que "yo soy yo y mis circunstancias". Bueno, pues con Neymar pasa algo parecido.

Mucha gente valora a Neymar esta temporada y piensa que ha rendido por debajo de sus posibilidades y, obviamente, por debajo de su precio. Pero para mí no, ni mucho menos. Recordemos las cifras del jugador:

Minutos: 2.830

Goles: 15

Asistencias: 15

Marca un gol cada: 188 minutos

Da una asistencia cada: 188 minutos

Si analizamos los datos, claro que puede parecer que no ha hecho una gran temporada, pero hay que tener paciencia. 

Ahora es cuando cualquier culé diría "¿Paciencia? ¿Hay que tener paciencia con un jugador que nos ha costado más de 100 millones y que ha conseguido que todo el mundo nos mire mal por estas negociaciones? Sí, hay que tenerla. Porque este Neymar tiene que jugar con una mochila a sus espaldas muy pesada. Cada uno que ha pasado cerca del brasileño le ha ido poniendo una piedra dentro de la mochila, sin que nadie le quitase ninguna.

Neymar ya vino con el peso de costar 57 millones, de haberle quitado un premio Puskas a Rooney y Messi, de haber sonado para todos los grandes clubes de Europa, de haber estado en el punto de mira de toda Europa durante años y de haber sido el buque insignia de una Brasil campeona de la Confederaciones ante la invencible selección española.

Pero es que hay más. Al llegar, se destapó el escándalo de las cifras de su fichaje, toda la prensa, no solo la madrileña, hablaba de la posible mala relación con Messi, y cómo se iban a entender en el campo, la obligación de levantar a un equipo casi muerto, o en vías de ello, una leyenda del club como Cruyff hablando de él continuamente y con dos lesiones de un mes cada una.

Además, hay que acordarse de jugadores como Modric o Alexis, que en sus primeras temporadas no rindieron ni a la mitad que en las siguientes.

Con Neymar, hay motivos para creer.